| 1 | »Éste es mi siervo, a quien sostengo, mi escogido, en quien me deleito; sobre él he puesto mi Espíritu, y llevará *justicia a las naciones. | |
| 2 | No clamará, ni gritará, ni alzará su voz por las calles. | |
| 3 | No acabará de romper la caña quebrada, ni apagará la mecha que apenas arde. Con fidelidad hará justicia; | |
| 4 | no vacilará ni se desanimará hasta implantar la justicia en la tierra. Las costas lejanas esperan su enseñanza.» | |
| 5 | Así dice Dios, el Señor, el que creó y desplegó los cielos; el que expandió la tierra y todo lo que ella produce; el que da aliento al pueblo que la habita, y vida a los que en ella se mueven: | |
| 6 | «Yo, el Señor, te he llamado en justicia; te he tomado de la mano. Yo te formé, yo te constituí como *pacto para el pueblo, como luz para las naciones, | |
| 7 | para abrir los ojos de los ciegos, para librar de la cárcel a los presos, y del calabozo a los que habitan en tinieblas. | |
| 8 | »Yo soy el Señor; ¡ése es mi *nombre! No entrego a otros mi gloria, ni mi alabanza a los ídolos. | |
| 9 | Las cosas pasadas se han cumplido, y ahora anuncio cosas nuevas; ¡las anuncio antes que sucedan!» | |
| 10 | Canten al Señor un cántico nuevo, ustedes, que descienden al mar, y todo lo que hay en él; canten su alabanza desde los confines de la tierra, ustedes, costas lejanas y sus habitantes. | |
| 11 | Que alcen la voz el desierto y sus ciudades, y los poblados donde Cedar habita. Que canten de alegría los habitantes de Selá, y griten desde las cimas de las montañas. | |
| 12 | Den gloria al Señor y proclamen su alabanza en las costas lejanas. | |
| 13 | El Señor marchará como guerrero; como hombre de guerra despertará su celo. Con gritos y alaridos se lanzará al combate, y *triunfará sobre sus enemigos. | |
| 14 | «Por mucho tiempo he guardado silencio, he estado callado y me he contenido. Pero ahora voy a gritar como parturienta, voy a resollar y jadear al mismo tiempo. | |
| 15 | Devastaré montañas y cerros, y secaré toda su vegetación; convertiré los ríos en tierra seca, y secaré los estanques; | |
| 16 | conduciré a los ciegos por caminos desconocidos, los guiaré por senderos inexplorados; ante ellos convertiré en luz las tinieblas, y allanaré los lugares escabrosos. Esto haré, y no los abandonaré. | |
| 17 | Pero retrocederán llenos de vergüenza los que confían en los ídolos, los que dicen a las imágenes: Ustedes son nuestros dioses. | |
| 18 | »Sordos, ¡escuchen! Ciegos, ¡fíjense bien! | |
| 19 | ¿Quién es más ciego que mi siervo, y más sordo que mi mensajero? ¿Quién es más ciego que mi enviado, y más ciego que el siervo del Señor? | |
| 20 | Tú has visto muchas cosas, pero no las has captado; tienes abiertos los oídos, pero no oyes nada.» | |
| 21 | Le agradó al Señor, por amor a su justicia, hacer su *ley grande y gloriosa. | |
| 22 | Pero éste es un pueblo saqueado y despojado, todos atrapados en cuevas o encerrados en cárceles. Son saqueados, y nadie los libra; son despojados, y nadie reclama. | |
| 23 | ¿Quién de ustedes escuchará esto y prestará atención en el futuro? | |
| 24 | ¿Quién entregó a Jacob para el despojo, a Israel para el saqueo? ¿No es acaso el Señor a quien su pueblo ha ofendido? ni obedeció su ley. | |
| 25 | Por eso el Señor derramó sobre él su ardiente ira y el furor de la guerra. Lo envolvió en llamas, pero no comprendió; lo consumió, pero no lo tomó en serio. | |